Cada 30 de abril en México, desde hace más de 40 años, se festeja el Día del Niño. Muchos padres de familia consienten a sus pequeños y los llevan al parque, les compran un helado, un pastel o van al cine. En las escuelas generalmente se hace un convivio donde el menú del día es elegido por los mismos alumnos. No obstante esto, el significado de ese día va más allá de pasteles, juegos y juguetes.
Durante la conmemoración se concientiza a los pequeños que tienen derechos y obligaciones como a ser niños, a tener educación, a ser felices y a ser protegidos y escuchados por todos los adultos y por toda instancia gubernamental para que los encaminen hacia el bienestar pleno y la felicidad idónea.
La idea de festejar el Día del Niño surgió el 20 de noviembre de 1959, cuando la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) tuvo una reunión en Ginebra, Suiza, donde decidió reafirmar los derechos universales de los niños. Este festejo ha permeado por múltiples regiones delorbe, donde se han tomado distintos días para celebrarlo. Al respecto de dicha conmemoración, la comunidad de nuestra casa de estudios –Benemérita y Centenaria Escuela Normal de Jalisco– opina que esta fecha resulta relevante, pues los actores sociales meta de la ByCENJ es la niñez y su escolarización: Como docente en formación tengo el deber de ser guía para que los niños adquieran el conocimiento que necesitan, y puedan con ello sobrevivir en esta sociedad. El Día del Niño es para apapacharlos por todo el esfuerzo que hacen ellos diariamente; este día se celebra la parte más humana, inocente y frágil de todos los seres humanos (Óscar Chávez, alumno de la ByCENJ).
La niñez resulta ser la plataforma desde donde se pueden sembrar cambios duraderos y con fundamentos morales, éticos y de conciencia sociocultural óptimos para el desarrollo de toda sociedad equitativa. Para ello el ser docente se vuelve la pieza clave del andamiaje social y humano, pues es este quien proporciona la sapiencia y el sustrato humano de las actuales sociedades:
"Ser maestro es algo de lo más humano que pueda existir, porque el compartir tus conocimientos es algo grandioso y te deja una gran satisfacción como miembro de la sociedad. Los niños son un pilar fundamental en nuestra labor, y aunque este día es especialmente dedicado a ellos nosotros como docentes diariamente debemos fundamentar y practicar los valores en el aula; no importa que no sea un día festivo" (Axel González, alumno de la ByCENJ).
Los niños en las sociedades actuales resultan ser la posibilidad de la trascendencia de ideas y creencias. Son a quienes se les deben trasmitir conocimientos y valores basados en derechos humanos, sociales y culturales: “Las niñas y niños son lo más importante en cualquier sociedad, porque son quienes crearán el futuro, deberán dar continuidad a lo que nosotros como adultos ya hicimos, y deberán hacerlo mejor” (Luis Ramos, alumno de la ByCENJ).
La niñez es, y así debe ser siempre advertida por todos, la meta de toda dinámica social e histórica, pues las decisiones colectivas deberán dirigirse hacia esta población. Una de las docentes, quien es además directora de una primaria en Guadalajara, opina: “Los niños son el motor de los maestros para trabajar. Son la alegría de la sociedad y se les debe proteger siempre. […] Tengan un excelente día. ¡Disfruten al máximo y gocen de la vida, tírense y ensúciense!” (Silvia Romo).